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2025 es un año de cierre

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Hemos llegado a junio, la mitad del año, y es un momento ideal para hacer una pausa y entender lo que estamos viviendo.


Es posible que durante estos últimos meses te has planteado que lo que tienes o lo que haces ya no resuena contigo, que estás en busca de algo nuevo que todavía no sabes qué es, pero sientes que ya es momento de terminar una etapa y prepararte para un nuevo comienzo.


Esta sensación de transformación profunda no es casualidad: responde a una confluencia de fuerzas que van mucho más allá de lo visible. Hemos recibidos varias señales que nos muestran que estamos atravesando un gran proceso evolutivo, que marca el fin de tiempos difíciles y el inicio a un periodo de mayor conciencia, más armonía y más luz.


Estas señales son:

 

La numerología: estamos en un Año 9


Según esta práctica, cada año tiene una energía distinta que va del 1 al 9. Este sistema viene de una tradición muy antigua llamada numerología pitagórica, que veía a los números como símbolos con un significado profundo.


Es como si la vida siguiera un ciclo de nueve etapas, y cada número representa una fase de ese camino: empezar, crecer, cambiar, madurar y cerrar. Así, cada año que vivimos nos invita a trabajar algo específico, como sembrar, construir, soltar o renovar.


¿Qué representa cada número en este ciclo?

  • Año 1: Inicio. Nuevas oportunidades, siembras, impulso personal. Se planta la semilla.

  • Año 2: Cooperación. Se desarrollan vínculos, alianzas y paciencia. Tiempo de nutrir lo iniciado.

  • Año 3: Expresión. Creatividad, comunicación, expansión social.

  • Año 4: Estructura. Organización, disciplina, construir bases sólidas.

  • Año 5: Cambio. Movimiento, libertad, apertura a lo nuevo.

  • Año 6: Responsabilidad. Familia, servicio, armonía, cuidado de los vínculos.

  • Año 7: Reflexión. Búsqueda interior, espiritualidad, introspección.

  • Año 8: Poder. Logros materiales, justicia, empoderamiento.

  • Año 9: Cierre. Liberación, conclusión de procesos.


¿De dónde salen estos números?

Cada año universal se calcula sumando los dígitos del año calendario. Por ejemplo:

2025 → 2 + 0 + 2 + 5 = 9


Entonces, 2025 es un Año Universal 9, que representa culminación, cierre de ciclos, integración y preparación para el nuevo ciclo que comienza con el Año 1. Es el último número del ciclo numérico del 1 al 9, y su vibración suele marcar un año de conclusiones, revelaciones y liberación a nivel colectivo.


¿Qué significa la energía del 9?

  • Finales importantes: El 9 te llama a soltar lo que ya no sirve, cerrar etapas, perdonar y dejar ir. Es un año ideal para sanar lo pendiente.

  • Compasión y humanidad: Tiene una energía altruista, solidaria. Te llama a actuar desde el corazón por el bien colectivo.

  • Revelación y conciencia: Puede traerte claridad sobre verdades escondidas, patrones profundos o asuntos inconclusos tanto personales como globales.

  • Preparación para un renacer: Lo que se libere en 2025 deja el terreno fértil para el 2026, que será un año 1 universal (inicio de ciclo).


¿Y qué significa vivir un Año 9?

Estás en el final de un ciclo de nueve años. Es momento de mirar hacia atrás, honrar los aprendizajes, perdonar, soltar lo que ya cumplió su ciclo y prepararte para lo nuevo que viene en el próximo Año 1.


Representa el final de un ciclo, una etapa donde la vida nos invita a cerrar capítulos, soltar lo que ya no sirve y prepararnos para lo nuevo que viene. No es un año para forzar, sino para integrar, sanar y hacer espacio.



Alineaciones astrológicas


La astrología nos muestra que se está dando un cambio en la humanidad, por las alineaciones muy poderosas de varios planetas que están cambiando de signos, estos son: Júpiter en Cáncer, Saturno en Aries, Urano en Géminis, Neptuno en Aries.


Estos movimientos planetarios traen cierres y nuevos comienzos, tanto a nivel colectivo como personal.


Y hay algo que ocurre con los 3 planetas transpersonales que son los que nos llevan a transformaciones radicales: Urano, Neptuno incluyendo Plutón que cambio de singo el año pasado, el 2024, ingreso en Acuario para quedares hasta el 2044.

 

Al cambiar de signos, cambian de elemento, han estado en signos de agua y tierra que representan emociones y estabilidad, y ahora entran en signo de fuego y aire que representan iniciativa y movimiento, lo que trae un cambio en la energía y el tono en el que vivimos, vamos a pasar de ser observadores pasivos para ser participantes activos en la creación de nuestra vida y del mundo en el que queremos vivir.

 

 

2025: Fin del Kali Yuga


El 2025 también representa el cierre del Kali Yuga, el último y más denso ciclo de los cuatro grandes Yugas de la tradición hindú. Nos pide cerrar ciclos y preparar el terreno para lo nuevo. Señala el fin de una era de oscuridad, caos y polaridad y la apertura hacia un nuevo ciclo más luminoso y evolutivo para la humanidad.


¿Qué es el Kali Yuga?

Según la sabiduría ancestral de la India, el Kali Yuga es la última de las cuatro grandes eras o Yugas que componen el ciclo del tiempo. Es conocido como la era de la oscuridad, la ignorancia y la desconexión espiritual. Un período dominado por el egoísmo, el materialismo y la separación del alma y la naturaleza.


Este ciclo, que se dice dura aproximadamente 432.000 años, estaría llegando a su fin en 2025, marcando un punto de inflexión para la conciencia colectiva.


El cierre del Kali Yuga representa la oportunidad de dejar atrás la ignorancia y el conflicto predominantes, para iniciar un camino hacia la luz, la conciencia y la unidad. Es el fin de un largo período de prueba para la humanidad, y el comienzo de una etapa donde la espiritualidad, la cooperación y el respeto por la vida ocupan un lugar central.


2025 te pide:


  • Cerrar ciclos desde la conciencia.

  • Sanar y depurar lo que intoxica cuerpo, mente y alma.

  • Conectar con lo espiritual de forma práctica.

  • Prepararte para el nuevo comienzo que es el 2026, Año Universal 1 .


El 2025 es, en esencia, una transición, lo viejo ya no tiene fuerza, pero lo nuevo aún no está del todo claro, lo estás creando en el presente.


Y este es un llamado a que participes a tomar parte activa en esto nuevo que está naciendo a través de tus pensamientos, tus emociones y tu manera de actuar.


Este proceso comienza en cada uno de nosotros... en ti.


¿Escuchaste el llamado a unirte?

 

 

 Tania

 

 

 

 

 

 

 

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